¡Qué son y para qué sirven los Rodillos Masajeadores de Cuarzo Rosa?
Las chinas los utilizaban en el s. VII, pero es ahora cuando valoramos sus propiedades para el rostro, cuello y escote. Los hay de jade, cuarzo rosa, amatista…
Parecen vivir un nuevo momento álgido entre las amantes de los cuidados de belleza. Los rodillos de jade y de cuarzo rosa están por todas partes (sobre todo en Instagram, YouTube y en las tiendas de cosmética y belleza online). Las influencers de belleza y las expertas se han rendido a los efectos positivos de las rodillos sobre la piel del rostro. Pero ¿para qué sirven y cómo funcionan? No es nada nuevo…
Lo usaban las chinas desde el siglo VII para reducir la hinchazón de la cara, drenar las toxinas de la piel e incrementar la circulación de la sangre, pero desde hace muy poco estamos valorando realmente lo que los rodillos de jade pueden hacer por nuestra piel.
Los masajes faciales y son de lo más beneficiosos para nuestra imagen. Relajar los músculos de la cara, mejorar la circulación y reducir las arrugas son los principales beneficios que proporciona este tipo de masajes. Al tonificar y aliviar la tensión de los músculos del rostro, la piel presenta un aspecto rejuvenecido y fresco. Tampoco hay que olvidar que el masaje estimula el sistema circulatorio que hace que los nutrientes y el oxígeno se transporten mejor por toda la piel. Esta buena circulación acaba reflejándose en el rostro que se ve más sano, brillante y terso.
¿Cómo se hace el masaje facial perfecto?
Para realizarlos es importante comenzar con la piel perfectamente limpia. Después, antes de utilizar el rodillo, se aplica el producto de tratamiento habitual, como puede ser un sérum, un aceite facial o una mascarilla hidratante. Una vez haya penetrado la mayor parte del producto, será el momento de empezar a usar el skin roller.
Como su función principal es ayudar a mejorar el drenaje linfático del rostro, el secreto es la dirección del movimiento del masaje. Lo mejor es seguir siempre la misma rutina e ir poco a poco trabajando las diferentes áreas de la cara. Nosotros os proponemos comenzar desde la zona superior e ir bajando lentamente para no olvidarnos ninguna sección.
Podemos comenzar por la frente y las cejas. Se masajean con movimientos que vayan del entrecejo hacia la raíz del pelo, haciendo grandes ‘ces’. El rodillo ayuda a drenar líquidos y se usa siempre de dentro hacia fuera.
Después pasaremos a la zona media del rostro. Se masajea este área usando el rodillo desde la nariz hacia las sienes, con un ligero movimiento ascendente final. Luego se repiten los movimientos pero esta vez desde la nariz hacia las orejas.
Cuando el rodillo tiene un cabeza pequeño, que suele ser lo más habitual, a continuación trabajaremos la zona baja de los ojos para combatir las ojeras. Bastará con deslizar el rodillo desde el lagrimal hacia el final de la ceja.
Terminada la zona media, seguiremos bajando hasta la fracción inferior de la cara. De nuevo, los movimientos del rodillo seguirán siendo desde dentro hacia fuera. En esta parte trabajaremos con especial atención a la parte inferior de la mandíbula, la zona en la que puede aparecer la temida papada.
El masaje debe durar entre 5 y 10 minutos. Aunque este orientado a la cara, los movimientos finales deben de terminar en la zona del cuello. ¿Un truco de experto? Guarda el rodillo en el frigorífico. El frío es una ayuda extra a la hora de desinflamar los músculos del rostro.
Beneficios de los rodillos faciales
Como sucede con cualquier rutina beauty, el masaje facial sólo funciona si se practica regularmente. Para disfrutar de sus efectos hay que ser constante. ¿Cuáles son estos efectos? Entre sus beneficios principales podemos destacar:
- Reduce las arrugas
- Disminuye las ojeras
- Promueve el drenaje linfático, elimina toxinas y reduce la sensación de hinchazón en el rostro
- Consigue una piel más elástica y luminosa
- Mejora la circulación sanguínea
- Produce una agradable sensación de relajación
- Aumenta la eficacia de las cremas y tratamientos.
